Uno de los caballos de batalla del jabonero artesano es el cabello. No es el único, ni mucho menos, pero yo diría que es el principal. Todos los que nos dedicamos a elaborar jabón, tarde o temprano, nos hemos topado con ese “muro” llamado pelo.
Y es que el jabón – que es una sal– y el pelo no se llevan demasiado bien ; la razón hay que buscarla en el PH
El PH de la piel es ácido. Dependiendo de la zona del cuerpo y de otros factores (raza, edad, sexo etc.) la literatura científica lo sitúa en valores comprendidos entre 4 y 7.
El Ph del cabello – que no del cuero cabelludo- es más ácido aún, siendo aproximadamente de 3.65
Un jabón natural, bien formulado y curado durante el tiempo suficiente, tiene un PH de alrededor de 8, lo que supone una alcalinidad 10.000 veces superior a la del cabello.
Al contacto con sustancias alcalinas, la cutícula del cabello se abre y esto hace que el pelo se torne opaco, poroso, encrespado y quebradizo.
Pero esto no ocurre solamente con los jabones naturales . Un estudio llevado a cabo en 2014 y publicado en el International Journal of Trichology, que analizó 123 de los champús comerciales más populares, encontró que el 65,62% tenían un pH de 6 o más.
Para contrarrestar los efectos que la alcalinidad produce en el cabello, los amantes del jabón tradicional y los seguidores de tendencias como el No poo , recurren al vinagre de manzana, o al limón, en el momento del aclarado, para de este modo cerrar la cutícula y conseguir que el pelo brille y quede manejable.
Pero para mí, que soy una persona con poco tiempo -y escasa inclinación- para las rutinas de belleza largas o complicadas, esta solución se me hacía tediosa e incómoda. Por eso , cuando tomé la decisión de dejar de utilizar productos de higiene comerciales , opté directamente por pasarme al champú sólido.
Los champús sólidos son un concepto innovador y ecológico. Es un producto concentrado que no necesita ser envasado ni conservado, que ocupa poco espacio y, por tanto, es práctico y cómodo de llevar en los viajes. El formato sólido permite, además, enriquecer el champú con aceites, plantas, y principios activos – adaptables a cada tipo de cabello y/o problema – que resultan difíciles de incorporar en un formato líquido.
Pero sus ventajas no terminan ahí; se trata de un producto de higiene que genera abundante espuma – incluso en aguas duras – y que cunde muchísimo : una pastilla, de unos 50 gramos , sirve para 40 o 50 lavados.
Estos champús sólidos de los que te hablo, se elaboran con tensioactivos naturales de origen vegetal derivados, principalmente, del aceite de coco . Se trata de tensioactivos suaves muy bien tolerados por la piel y ampliamente aceptados en cosmética natural y ecológica. Los más habituales son : Sodium Cocoyl Isethionate ( SCI), Sodium Cocoyl Sulfate (SCS) y Sodium Lauryl Sulfoacetate (SLSA) [¡ Ojo! No lo confundas con el Sodium Lauryl Sulfate ( SLS) pues este último no es nada recomendable]
Nada tienen que ver, por tanto, con los tensioactivos sintéticos que utiliza la industria para la fabricación de detergentes, lavavajillas, champús y geles comerciales. Estos tensioactivos – derivados del petróleo – son irritantes y poco amigables con el medio ambiente.
¿Cómo formular un champú sólido?
La fórmula base para elaborar un champú sólido es:
- 80% de tensioactivo (sólido)
- 10% de agua ( o infusión, o hidrolato)
- 10% de aceites
La cantidad de agua es fija ( añadir una cantidad mayor o menor puede traducirse en una consistencia final demasiado blanda o , por el contrario, demasiado quebradiza) y puede sustituirse por infusiones o hidrolatos que nos permitirán aprovechar sus magníficas propiedades : romero, ortiga verde, cola de caballo, alga espirulina, manzanilla, caléndula….
La cantidad de aceite sí puede variarse ligeramente ( +/- 5%) , dependiendo de si estás formulando para un cabello seco o uno graso. Del tipo de cabello también dependerá la elección de unos aceites u otros.
Respecto a los tensioativos, puedes utilizar uno solo o una combinación de varios. También puedes añadir un pequeño porcentaje del algún tensioactivo líquido como cocobetaína. La betaína ayudará a disolver los otros tensioactivos sólidos, suavizará la fórmula y aumentará la formación de espuma.
Hay una buena cantidad de plantas , arcillas y principios activos , muy beneficiosos para el cabello, que pueden utilizarse para enriquecer el champú. Algunos principios activos que puedes añadir son el pantenol (pro vitamina B5), la inulina o las proteínas de seda. Las arcillas (arcilla verde, Caolín, arcilla Rasshoul ….) son otros ingredientes que suelen incorporarse habitualmente.
Mención aparte merecen una serie de plantas, poco conocidas en occidente pero de larga tradición en la medicina tradicional Ayurveda , como son : Shikkakai, Amla, Kapoor kachli, Sidr Bhringaraj o Neem. Estas plantas, que se venden molidas y se incorporan directamente al champú, son una potente herramienta para mantener la salud y belleza del cabello.
Como ves, existen muchísimas opciones que te permitirán formular el champú adecuado para cada tipo de cabello. Lo único que debes tener en cuenta es que , siempre que añadas principios activos, arcillas, plantas en polvo o cualquier otro ingrediente , debes descontar la cantidad utilizada de la parte de los tensioactivos. Por ejemplo, si añadades 6% de polvo de Amla, 2% de pantenol y 2% de inulina , tendrás que rebajar la cantidad de tensioactivo al 70%.
Naturalmente, puedes añadirle colorantes, aceites esenciales o fragancias , pero al tratarse de porcentajes muy pequeños no es necesario descontarlos de los tensioactivos. Al menos yo no lo hago.
¡Y no vayas a olvidarte del PH ! Todos los tensioactivos tienen un PH alcalino, por tanto necesitas añadir a la fórmula ácido cítrico o ácido láctico para ajustarlo a un PH fisiológico. A mí me gusta dejarlos en valores comprendidos entre el PH del cabello (3,65) y el del cuero cabelludo (5.5), pero si tu pelo es fino y graso seguramente agradecerá valores algo más altos, con los que obtendrás más cuerpo y volumen.
Respecto a la elaboración, es bastante sencilla pero deberás utilizar, obligatoriamente, mascarilla protectora. El polvo que se desprende de los tensioactivos al manipularlos, penetra muy rápidamente en la nariz y en la boca provocando tos e irritación.
Ya sea en frío o en caliente, el sistema es el mismo: mezclar, amasar, enmoldar – o modelar con la mano si no te importa que tengan un aspecto más rústico – y dejar reposar o enfriar, ya sea a temperatura ambiente o en el congelador.
Una vez terminados no hay problema en utilizarlos inmediatamente – cumplirán su labor de limpiar perfectamente- pero es aconsejable dejarlos reposar para que pierdan un poco de humedad y cojan una buena consistencia. Dependiendo de los ingredientes y/o plantas que hayas utilizado este tiempo de reposo será menor o mayor, así que, como siempre, será la práctica la que te irá guiando.
Y ya, para terminar, si has decidido pasarte al champú sólido – cosa de la que te aseguro, no te arrepentirás – déjame que te haga una pequeña advertencia: al principio, notarás en el pelo una sensación como de aspereza. Es normal, tu pelo está acostumbrado a las siliconas que incorporan los champús comerciales y necesita un período de adaptación. Después de unos cuantos lavados, todos los residuos químicos se habrán eliminado completamente y la fibra capilar recuperará su suavidad y brillo naturales.
¡Gracias por leerme!
Referencias:
Lambers H, Piessens S, A Bloem, Pronk H, P. Finkel. Natural skin surface pH is on average below 5, which is beneficial for its resident flora. Int J Sci Cosmet .2006 Oct; 28 (5): 359-70.
Gavazzoni Dias MR, de Almeida AM, Cecato P, Adriano AR, Pichler J. The shampoo pH can affect the hair: Myth or Reality?. Int J Trichol 2014;6:95-9
Pavlić Z, Vidaković-Cifrek Z, Puntarić D. Toxicity of surfactants to green microalgae Pseudokirchneriella subcapitata and Scenedesmus subspicatus and to marine diatoms Phaeodactylum tricornutum and Skeletonema costatum. Chemosphere.2005 Dec;61(8):1061-8. PubMed PMID: 1626337
Para saber más:
http://quimica.laguia2000.com/conceptos-basicos/escala-del-ph
http://www.ehu.eus/biomoleculas/ph/ph.htm
http://mariaparadela.es/ayurveda/plantas-utilizadas-en-ayurveda-3a-parte/